Cuando se habla de niñas, niños y adolescentes con altas capacidades (AACC), es común que surjan preguntas y preocupaciones entre los padres. Una de las dudas más frecuentes es si las altas capacidades pueden considerarse un problema de aprendizaje. Este artículo está dirigido a los padres y madres que tienen hijos diagnosticados con altas capacidades o que presentan características de sobredotación intelectual, pero que tienen la inquietud de saber cómo ayudar mejor a sus hijos.
Entendiendo las Altas Capacidades
Las altas capacidades, también conocidas como sobredotación intelectual, se refieren a habilidades significativamente superiores en uno o más dominios en comparación con sus pares. Estos dominios pueden incluir la inteligencia general, habilidades específicas (como matemáticas o música), creatividad, liderazgo o habilidades psicomotoras.
¿Las Altas Capacidades son compatibles con problemas de aprendizaje?
Aunque las altas capacidades no son un problema o trastorno de aprendizaje, las niñas, los niños y adolescentes “sobresalientes” (como se les ha llamado de modo casi oficial en México) pueden enfrentar desafíos únicos que afectan su rendimiento académico y bienestar emocional. Estos desafíos pueden ser malinterpretados como problemas de aprendizaje porque presentan algunos signos como los siguientes:
1. Desarrollo asíncrono
Uno de los retos más comunes es el desarrollo asíncrono, lo que significa que las habilidades cognitivas de un niño con altas capacidades no coinciden con su desarrollo emocional, social o físico. Por ejemplo, un niño con habilidades matemáticas a nivel de secundaria podría tener habilidades sociales típicas de su edad cronológica. Este fenómeno se describe muy frecuentemente con la expresión de tener la sensación de estar hablando con un adulto que está atrapado en el cuerpo de un niño. Esta discrepancia puede crear frustración y dificultades en el entorno escolar.
2. Alta sensibilidad emocional y sensorial
Los niños con AACC a menudo tienen una alta sensibilidad emocional y sensorial. Pueden ser extremadamente perceptivos y empáticos, lo que a veces puede llevar a una sobrecarga emocional. Además, pueden reaccionar de manera intensa a estímulos como ruidos fuertes, luces brillantes o cambios en su rutina, lo que puede afectar su rendimiento escolar.
3. Perfeccionismo y miedo al fracaso
El perfeccionismo es otro rasgo común en los niños superdotados. Pueden tener expectativas muy altas de sí mismos y experimentar ansiedad cuando no alcanzan sus estándares. Este miedo al fracaso puede llevarlos a evitar tareas que consideran difíciles, lo cual puede ser malinterpretado como falta de motivación o problemas de aprendizaje.
Estos son solo tres de los más comunes rasgos que, pese a ser signos de algún problema de aprendizaje o trastorno neurológico, no cursan con otras características descritas en los perfiles de aquellos diagnósticos.
¿Qué hace la diferencia?
El rasgo que no es común con los trastornos y problemas de aprendizaje es lo que detonó la oleada de estudio sobre las altas capacidades. El elemento distintivo (que llevó a hipótesis análogas a lo que en medicina es un diagnóstico diferencial) fue el cociente intelectual (CI) de estos individuos. En todos los casos el CI está por encima del promedio.
Con ciertas diferencias en el límite inferior según la región o la especialidad de quien lo ha estudiado (algunos lo ponen en un puntaje de 115 y otros lo fijan en 130), quienes han estudiado con rigor metodológico estos casos notaron que es ese cociente más alto que la media —y no un trastorno o problema de aprendizaje— lo que causa algunos de los signos que presentan, como tedio, aburrimiento en ambientes escolares, constante cuestionamiento, involucramiento excesivo en temas de interés, etc.
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Doble excepcionalidad: Altas Capacidades y problemas de aprendizaje
La doble excepcionalidad se refiere a niños perfilados con altas capacidades —o sea, con un CI mayor a 115 o a 130 y algunos rasgos psico-socio-emocionales— que, además, sí presentan alguna neurodivergencia, como el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH) o algún problema de aprendizaje, como la dislexia.
Estos niños pueden tener habilidades sobresalientes en ciertos ámbitos mientras enfrentan dificultades significativas en otros. Los siguientes son sólo dos ejemplos relativamente frecuentes, pero hay muchos más.
1. TDA, TDAH y altas capacidades:
Un niño con TDA o TDAH y altas capacidades puede mostrar comportamientos impulsivos y tener problemas para concentrarse en tareas que no les interesen. Sin embargo, cuando están comprometidos con una actividad que les apasiona, pueden demostrar una concentración profunda y sostenida. Es crucial diferenciar entre la falta de interés y las dificultades inherentes al TDA y al TDAH.
2. Dislexia y altas capacidades:
Un niño superdotado con dislexia puede tener dificultades significativas para leer y escribir, a pesar de tener un pensamiento crítico avanzado y habilidades de resolución de problemas. Incluso puede ser disléxico y al mismo tiempo estar adelantado a sus pares en cuanto a su desarrollo de lenguaje. Este contraste puede llevar a una identificación errónea de sus capacidades reales y necesidades educativas.
Apoyo adecuado para Niños con Altas Capacidades
Es fundamental que los padres y educadores comprendan que las altas capacidades no son un problema de aprendizaje, sino una característica que requiere un enfoque educativo específico. Aquí hay algunas estrategias para apoyar a los niños superdotados:
1. Adecuación curricular
La adecuación curricular es vital para satisfacer las necesidades de los niños con AACC. Esto puede incluir el enriquecimiento del currículo, aceleración en ciertas materias, o proyectos independientes que desafíen sus habilidades.
2. Apoyo emocional
Los niños superdotados necesitan un apoyo emocional sólido. Es esencial que se sientan comprendidos y aceptados. Fomentar un entorno donde puedan expresar sus emociones y trabajar en su autoconfianza es crucial.
3. Estrategias personalizadas
Cada niño es único, y las estrategias deben adaptarse a sus necesidades individuales. Para aquellos con doble excepcionalidad, es necesario un enfoque que integre tanto el desarrollo de sus talentos como el manejo de sus dificultades.
Un lugar para ti
Las altas capacidades no son un problema de aprendizaje, pero los niños superdotados pueden enfrentar desafíos únicos que requieren una comprensión y un apoyo adecuado. En Instituto CASO, nos especializamos en identificar y nutrir las altas capacidades, proporcionando un entorno educativo que celebra la diversidad y apoya el desarrollo integral de cada niño.
Si tu hijo ha sido diagnosticado con altas capacidades o muestra características de sobredotación intelectual, te invitamos a explorar nuestros programas y recursos. Estamos aquí para ayudarte a descubrir y potenciar el talento único de tu hijo, asegurando que reciba la educación y el apoyo que merece.
Para más información sobre nuestros servicios y cómo podemos ayudarte, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. ¡Estamos aquí para acompañarte en cada paso del camino!